lunes, 11 de mayo de 2015

Historia de Villa El Salvador (I)

  • La formación de Villa El Salvador: CUAVES la organización comunal
Por: Vladimir Uñapillco Champi
Historiador
UNMSM
ZUM Ciudadano


La historia de Villa El Salvador (VES), se inicia el 27 de abril de 1971. La tugurización y las constantes invasiones, que eran consecuencia del sistema capitalista basado en la renta, generó la invasión de unos terrenos públicos y privados en San Borja, Surco y Pamplona Alta, en las faldas de un cerro a 13 kilómetros al sur de Lima, por unas 200 familias, y en pocos días llegaron a tener cerca de 9000 personas instaladas en dicho lugar. La población con los ‘organizadores de la invasión’[1] se preparan a negociar su permanencia, mientras el Estado se preparaba a reprimir la invasión y mantener el orden social[2]. La reacción del gobierno generó,  el 5 de mayo  de 1971, el enfrentamiento entre las fuerzas armadas y las poblaciones invasoras dejando como resultado la muerte de  Edilberto Ramos Javier (ZAPATA, 1996: 86). El general Artola manda detener a monseñor Bambarén generándose una tensión entre la iglesia católica y el gobierno militar[3].

La protesta de la iglesia genero la destitución de Artola por haber realizado la detención. Asimismo la presión por parte de los sectores dominantes que protestaron abiertamente contra la politización de la iglesia, la agresión a la propiedad privada, consideraron la invasión el detonante para que situaciones similares se repitan. El gobierno decide trasladar a los invasores a las pampas de Tablada de Lurín el 15 de mayo de 1971, hacia las pampas de Tablada de Lurín, a 20 kilómetros de Lima. La población fue distribuida siguiendo el modelo del ‘grupo residencial’[4], se construirá una gran urbanización popular, una ciudad modelo, al que el monseñor Bambarén designa con el nombre de Villa El Salvador[5].

La organización de la comunidad desde los inicios estuvo impulsada por un grupo de dirigentes así como de los integrantes del Sinamos. Por un lado estaba la forma de cooperativa y, por otro se tenía la organización comunal, este último impulsado por Antonio Aragón Gallegos[6]. Producto de estos conflictos se decide en julio de 1973, luego de realizarse la ‘primera convención de delegados’, aprobar los estatutos y elegir por un periodo de dos años el Primer Consejo Ejecutivo Comunal, de la Comunidad Urbana Autogestionaria de Villa El Salvador, Cuaves, siendo este el único modelo de organización que representa a la comunidad frente al Estado[7].

Esta primera etapa VES, tiene una autonomía relativa con relación al municipio de Villa María del Triunfo al cual pertenecía, la participación gira en torno a la CUAVES y esta se convierte en el organismo de autoridad local y de representación social. (ROJAS, 2006: 126)

Se mostraba la determinación del Estado para atender y organizar a los pueblos jóvenes que se estaban formando[8]. La elaboración de los planes de desarrollo fue muy importante durante toda la historia de VES, considerados como un instrumento comunal, pues permitió dar orientación en la búsqueda de objetivos comunes de desarrollo[9]. En la comunidad se da una concertación entre las inmensas mayorías para fundar VES, fue un esfuerzo de educación y organización popular desde la comunidad, desde las manzanas, en los grupos, ‘todas las noches’. Es en este espacio que se dio este diálogo y concertación[10].

La comunidad contribuyó a fundar, construir y dirigir los primeros colegios primarios y secundarios, en el marco de la reforma educativa reglamentada por el Gobierno[11]. Profesores, desde jóvenes entusiastas preocupados por la educación, profesores sin título y, maestros titulados recién egresados de la Universidad. Víctor Nicho ex dirigente y Director del Colegio Pachacutec se refiere sobre este periodo, ‘como dirigente que alguna vez fui en VES, como maestro no puedo dejar de mencionar las ricas experiencias que tuvimos, desde el momento en que invadimos y ocupamos los arenales, nuestra preocupación- la de los profesores y maestros- fue la educación. Para esto en grandes movilizaciones, levantamos escuelas de esteras y luego de cemento’[12].

Asimismo, alumnos de la Universidad La Católica, tributarios de la teología de la liberación, llegaron a Villa El Salvador, atraídos por el Monseñor Bambarén, desde sus inicios con el objetivo de iniciar un proyecto educativo, pedagógico. El proyecto lleva el nombre de Centro Educativo Comunal de Villa El Salvador, ‘Cecomves’.  Monseñor Bambarén propone una relación con la institución Fe y Alegría que hacía cinco años se había fundado también en el Perú, trabajando de manera prioritaria en los Pueblos Jóvenes, denominándose ‘Cecom Fe y Alegría de Villa El Salvador [13]. En octubre, se funda el colegio N° 7072 “San Martin”, en el primer sector, es el primer colegio de primaria que se creaba, y el “Cecom Fe y Alegría” el primer colegio con primaria y secundaria. Con la creación del Centro de Comunicación Popular en el año 1974,  se intentaba contar con un espacio joven donde la cultura y el arte reúnan a los alumnos y maestros[14].

La participación de las mujeres en la organización comunal fue muy importante desde la creación de VES. En los primeros años la mujer se va encargar de la organización en el hogar y, posteriormente con la formación de los clubes de madres asumen nuevas responsabilidades y presencia dentro de la sociedad. Los “clubes de madres”, ante la crisis económica, se organizaron en grupos para aliviar colectivamente los problemas de la escasez. En la década de  1970 se forman las primeras organizaciones de sobrevivencia, y en ellas se inicia la politización femenina[15].

La relación entre los dirigentes de VES y el gobierno se quebraron con el ascenso del general Francisco Morales Bermúdez al poder, dando inicio así a la segunda etapa del Gobierno de las Fuerzas Armadas (1975-1980), la convivencia entre barriadas y gobierno se rompe, pasando del diálogo al enfrentamiento. Dos de los acontecimientos más importantes en periodo fueron, la marcha del 23 de Abril de 1976, en la que miles de dirigentes, padres de familia y maestros se movilizaron hasta Palacio de Gobierno demandando la solución a sus problemas educativos logrando el nombramiento de los profesores de secundaria. El segundo acontecimiento fue la huelga indefinida convocada por el SUTEP en 1979, el cual es recordado por la solidaridad de la población con los maestros[16].






[1] Los organizadores de la invasión jugaban un papel importante en esta primera etapa, pues se encargaban de la negociación con las autoridades, y mantendrían informados a los integrantes de la población. (ZAPATA, 1996: 80)
[2] Aníbal Quijano, Lima noviembre de 1996. En CORONADO, Jaime y Ramón, PAJUELO. Villa EL Salvador: poder y comunidad. 1996. Lima: CEIS-Centro comunitario mental. 177.
[3] Monseñor Bambarén considerado el ‘Obispo de los Pueblos Jóvenes’, fue uno de los gestores en la formación de barriadas en especial de Villa EL Salvador, legándole el nombre. La detención que el ejercito realiza sobre él se debe principalmente a su intervención en una misa en solidaridad con los invasores realizada el 9 de mayo.
[4] El sistema ‘modular  de grupo residencial’, responde a las necesidades de identidad y cohesión interna que debe tener una comunidad, esta idea fue desarrollada por el arquitecto peruano Miguel Romero, joven de 23 años que diseño el modelo urbano de VES. En 1988, obtiene el 1° Premio de Urbanismo en la VII Bienal  de Arquitectura y Urbanismo del Colegio de Arquitectos del Perú.
[5] Monseñor Bambarén explica que el nombre se debe a la variante ‘Cristo Salvador’ por ‘Villa El Salvador’.  En ‘Conversatorio por  el XXXIX aniversario de VES’. Evento realizado en Villa El Salvador por sus 39 años de fundación, el 14 de mayo del 2010.
[6] Antonio Aragón uno de los dirigentes más importantes de los primeros años de Villa El Salvador, conjuntamente con Apolinario Rojas y Epifanio Pérez Yarasca. Aragón con el apoyo de la decima región del SINAMOS decidieron convertir a Villa El Salvador en una ciudad Autogestionaria, donde los títulos de propiedad debían ser  colectivos y estar en manos de instituciones populares representativas de la comunidad, además querían que la comunidad se orientara a la producción y fuera un agente activo del desarrollo económico industrial, en cooperación con el Estado. Aragón se convirtió en el dirigente más influyente, desde su propuesta anhelaba el porvenir y el progreso para conquistar un mejor futuro para los que carecían de todo. Caso contrario sucedía con la población que solicitaba título de propiedad sea de manera individual para comenzar a construir sus casas. (ZAPATA, 1996: 89-91)
[7] La Comunidad Urbana Autogestionaria de Villa El Salvador (Cuaves), organización popular que aglutinaba  a todos los delegados, era diferente a las formas de representación de los pueblos jóvenes formados anteriormente. Se organiza en tres niveles: un nivel de manzana, uno de grupo residencial y a nivel central comunal. En cada uno de estos tres planos de organización territorial se reproduce la misma estructura de cargos: en producción, comercialización, servicios, educación y salud. Esta misma estructura de cargos es aplicada en los  grupos residenciales y en las manzanas. (FRANCO,  1993: 421- 432)
[8] Villa El Salvador en este periodo es considerado, vía resolución, como un pueblo joven (Resolución Directoral N° 0001-72-VI-DI del 5 de enero de 1972), que se encuentra dentro del distrito de Villa María del Triunfo.
[9] El primer plan de desarrollo integral, fue posible gracias a las CUAVES, durante la década de los 70 y 80, tuvo que ver, principalmente, con el desarrollo urbano, es decir, con la organización y funcionamiento de la ciudad, con la ocupación ordenada del espacio, del territorio (manzanas, grupos residenciales, áreas para colegios, postas medicas, avenidas, mercados, zonas recreativas y comerciales, zona agropecuaria y productiva), etc... La gente decía: ‘porque nada tenemos lo haremos todo’, y ‘antes que casas fábricas’… el segundo plan de desarrollo, elaborado a mediados de la década de los 80, propuso dar el salto cualitativo, transformando VES de una ciudad dormitorio a una ciudad productiva. Esta visión de futuro no sólo es un gran sueño, es también el resultado de la concertación de las voluntades de los pequeños empresarios, la Municipalidad y la CUAVES. (RÍOS)
[10] AZCUETA, Michel. Acuerdos y desacuerdos en la historia de Villa El Salvador. Momentos de concertación e intolerancia en la historia de Villa El Salvador. 1993, en Rev. Democracia, paz y desarrollo en el ámbito local urbano. IEP, N° 1.
[11] En lo que denomino la primera etapa del Gobierno Revolucionario de las Fuerzas Armadas se realizaron una serie de reformas, dentro de ellas la educativa, es así que el 24 de marzo de 1975 se da la Ley General de Educación con las siguientes finalidades: extender las oportunidades educativas a todos los peruanos, propender a la creación del ‘hombre nuevo’ (critico, participativo y solidario) y establecer un nuevo sistema educativo que incorpore: educación inicial, educación básica, educación superior. (HUIZA, 2004:  258-283)
 [12] Primer Congreso Distrital de Educación de Villa El Salvador. 2001. Lima: DESCO, pp. 60.
[13] Fe y Alegría es una institución de la sociedad civil instalada en catorce países de Latinoamérica. Proviene del dinamismo de la Iglesia católica y opta por relacionarse con los sectores más pobres de la sociedad. Busca brindar educación integral popular de calidad, trabajando en conjunto con el Estado. FERNANDEZ ZAZ, María Paloma. C.E. Fe y Alegría N° 17, en Primer Congreso Distrital de Educación de Villa El Salvador. 2001. Lima: DESCO, pp. 108-119.
[14] En este espacio se organizaron talleres de música y teatro dando a conocer mediante el arte escenas de la formación y vida cotidiana de VES, dando a los jóvenes mediante este medio una identidad comunitaria. El dinamismo que mostro el Centro de Comunicación Popular durante su primer año le mereció el reconocimiento de la Naciones Unidas cuando en 1975 lo declaró ‘proyecto piloto experimental de comunicación horizontal en América Latina’, mientras tanto en el Cecom Fe y Alegría de Villa El Salvador, se desarrollaban los ‘círculos de estudios’ que  aglutinaban a los más jóvenes  en torno a cuatro líneas de trabajo: periodismo, teatro, música y proyección de películas. (BLONDET)
[15] Es para el año de 1971 se organiza el primer club de madres, siendo su primera presidenta la vecina Rosa Ruíz de Paz.
[16] TAKANO, Guillermo. ‘Crisis de las organizaciones sociales a propósito de la ocupación de los terrenos de la universidad del Cono Sur’. En Construyendo Democracia. 2006. Lima: Desco. Año 2, Nº 8, junio, pp. 4-6.